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Devocional | El Dios que se hizo Hombre

Devocional | El Dios que se hizo Hombre

Mientras que la afirmación de que el Dios de todo el universo se hizo hombre en la persona de Jesús, ha sido el centro de tanta controversia en la historia, nosotros no debemos temer a afirmar lo que la escritura dice acerca de esta verdad y de las implicaciones que trae consigo creerla o no. Aunque sabemos que nuestra mente finita no puede comprender a totalidad al Gran Dios de los cielos, es verdad que el Dios eterno, entró en el tiempo. Él, siendo invisible, se hizo visible en Cristo. No teniendo limitaciones, se privó así mismo de hacer uso en muchas ocasiones de su poder, estando en su condición humana. 

(Filip 2:5-8 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.)

Dios dejó su trono, para nacer en un pesebre. El Dios inaccesible se hizo accesible por medio de Cristo. Hizo habitación en la tierra, en medio de los hombres. En la encarnación Dios permaneció siendo 100% Dios al mismo tiempo que era 100% humano. Esto es así, debido a que la naturaleza Divina es inalterable, pero para que Jesús pudiera ser el represéntate de la humanidad, el segundo Adán, que daría su vida por su pueblo, tenia que ser completamente hombre. 

Que bien haría a nuestras almas nadar en las profundas aguas de esta doctrina bíblica. El alma encuentra descanso, cuando entiende que desde su trono el Dios que gobierna vino al mundo a Salvar. Tomando forma de hombre, Jesús vivió perfectamente, murió por nuestros pecados y resucitó para nuestra justificación. Las buenas noticias es que Dios hizo algo para redimirnos. Lo hizo por medio de  su Amado Hijo. Todo aquel que ponga su fe en Él hallará perdón y vida gratuitamente. No tardes más, arrepiéntete de tus pecados y confía en Cristo.

Las buenas noticias es que Dios hizo algo para redimirnos. Lo hizo por medio de  su amado su Hijo. 

Este Devocional también ha sido publicado en:
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